La salida fue a Corbera de Ebro. En todas las cintas de las grabadoras no se consiguió practicamente ningún material interesante. El día fue muy poco fructuoso.

No lo vimos claro, se colgó y volvió a llamar porque lo que estaba ocurriendo no tenia explicación. Al volver a intentar llamar, sonaron el teléfono que estaba en otra parte del piso y la grabadora, a la vez.
Al encontrar el teléfono mi hija paró de llamar, pero la grabadora seguía sonando, sin parar. No podíamos pararla y la única manera fue quitándole las pilas.
Hay dos posibilidades. Una razón tecnológica puede ser que hubiera una interferencia. Otra razón podría ser la posibidad de que esa noche, en Corbera de Ebro, se hubiera conseguido contacto con alguien.
Tenemos pendiente otra salida a Corbera e investigar más en aquella zona de los "sucesos".
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